Los niveles de cortisol de un perro pueden sincronizarse con sus dueños cuando comparten un vínculo emocional desarrollado a través de experiencias positivas juntos.
Si crees que tu perro se estresa, parte del problema podría ser… bueno, tú.
En un nuevo estudio de la Universidad Linköping de Suecia, los investigadores encontraron que los niveles de estrés de los perros estaban muy influenciados por sus dueños y no al revés.
Sus hallazgos sugieren que "los perros, en gran medida, reflejan los niveles de estrés de sus dueños".
El estudio, que se publicó en la revista Scientific Reports, incluyó a 58 perros, 25 border collies y 33 perros pastores de Shetland, y sus dueñas exclusivamente mujeres.
Los dueños de perros respondieron preguntas sobre sus propios rasgos de personalidad, incluido el neuroticismo y la apertura. También realizaron una tarea similar para sus perros, respondiendo un cuestionario de personalidad canina en el que calificaron a su perro en rasgos como excitabilidad, temor y agresión.
Los investigadores observaron las concentraciones en el cabello de la hormona del estrés cortisol tanto en los perros como en sus dueños como un indicador de estrés.
Las concentraciones de cortisol en el cabello se tomaron dos veces de muestras cortadas cerca de la piel, una en verano y otra en invierno. En ambas muestras, los niveles de cortisol de los perros estaban "sincronizados" con sus dueños.
Los autores dicen que este es el primer estudio que identifica la sincronización a largo plazo en los niveles de estrés entre miembros de dos especies diferentes.
Casi parece intuitivamente obvio que existe una asociación entre el estrés y las emociones humanas y las de sus mascotas. Probablemente muchos de nosotros hemos sospechado esa relación. Claramente, al medir los niveles de cortisol, los investigadores pudieron demostrar esto utilizando datos científicos.
El comportamiento de tu perro podría ser un indicador de tu salud
El estudio también brinda una mayor comprensión de los niveles de estrés del perro/propietario relacionados con el comportamiento, el ejercicio y otros aspectos del estilo de vida.
Por ejemplo, se sabe que el cortisol se ve afectado por la actividad física. Para controlar esto, los investigadores incluyeron perros que eran principalmente mascotas y compañeros, así como perros que fueron entrenados y compitieron activamente en actividades como cursos de agilidad.
Ambos grupos de perros mostraron sincronización de cortisol, pero la correlación fue aún más fuerte entre los perros y los dueños que compitieron.
La razón, sugieren los autores, puede ser que los perros y los dueños que entrenan juntos pueden estar más unidos emocionalmente al pasar más tiempo juntos y participar en tareas compartidas.
Otros efectos notables en los niveles de cortisol incluyeron la estación (durante el invierno hubo niveles más altos) y el sexo (las perras mostraron concentraciones de cortisol más altas que los machos).
El estudio también arroja más luz sobre el concepto de "contagio emocional", el compartir o reflejar la respuesta emocional entre los animales que viven en un grupo.
Si bien generalmente se observa dentro de la misma especie, también se puede observar entre especies, como en este caso de los perros y sus dueños.
“El perro es un buen modelo ya que comparte la vida cotidiana con su dueño. Y sabemos desde antes que tenemos efectos beneficiosos para la salud de los perros y que respondemos de manera similar a la interacción a corto plazo”, dijo Lina Roth, PhD, profesora de la Universidad de Linköping y autora del estudio.
Roth dijo que los resultados de su trabajo pueden conducir a muchas áreas diferentes de investigación, incluida una mejor comprensión del estrés del perro según la raza y los efectos de tener dueños masculinos.
Las implicaciones prácticas de dicho trabajo podrían conducir a un mejor emparejamiento de diferentes razas con personas en función de los rasgos de personalidad del propietario.
Dicha información podría ser particularmente útil en el ámbito de los animales de servicio o animales de apoyo emocional.
El estudio también sirve como un recordatorio para los dueños de perros de que, sí, tu perro puede y se estresará de vez en cuando, especialmente si tú está estresando.
A la luz de esta información, es importante tomar nota de su comportamiento porque puede afectar en gran medida la salud general de su mascota.
Según el American Kennel Club, la ansiedad y el estrés en los perros pueden deberse a muchas cosas diferentes, como la separación, el miedo y el envejecimiento.
Los síntomas de estrés en los perros pueden incluir:
- agresión
- jadeo
- ladridos excesivos
- hacer sus necesidades en la casa
Hay diferentes opciones de tratamiento disponibles para perros con estrés, que incluyen entrenamiento adicional e incluso ciertos tipos de medicamentos.
Pero, como sugiere este estudio, los cambios de comportamiento también pueden comenzar con los propietarios.
Entonces, si estás estresado, piensa en el impacto que puede tener en tu perro y toma medidas para remediar la situación.
Esto puede ser especialmente obvio en lugares de estrés como en el veterinario: Los clientes despreocupados tienen perros que saltan fácilmente sobre la mesa de examen o tienen mascotas sumisas. Los clientes que tienen una ansiedad clara y entran en pánico fácilmente, tienen mascotas que corren o se esconden debajo de la silla del dueño o detrás del dueño.
Conclusión
Un nuevo estudio encontró que los niveles de estrés de los perros están muy influenciados por los niveles de estrés de sus dueños.
Los autores sugieren que la razón de esto puede ser que los perros y los dueños que pasan más tiempo juntos pueden estar más unidos emocionalmente.
Estos hallazgos podrían ayudar a futuras investigaciones y comprender cómo los animales de servicio o de apoyo emocional pueden mejorar mejor la salud humana.
La investigación también es un indicador de que los dueños de mascotas deben ser conscientes de cómo su propia salud también puede afectar el bienestar de los miembros peludos de su familia.