Podrías estar arruinando la confianza de tu perro y ni siquiera saberlo

Como todos sabemos, la confianza debe construirse, y es increíblemente difícil recuperarla una vez que se rompe.

Con suerte, habrás podido leer el artículo que hablaba sobre las señales de que tu perro confía en ti.

Piensa en la confianza como un puente. Si los cimientos están defectuosos, probablemente no quieras cruzarlo.

Recuerda, la confianza es una calle de doble sentido, así que pasemos al otro lado de eso: romper la confianza. Esto no es solo cosa de humanos. También se puede romper con tu perro. En este post te contamos cómo puedes arruinar la confianza con tu perro.

Estas son las formas en que podrías estar rompiendo la confianza de tu perro:

1. Obligar a tu perro a hacer cosas que no quiere hacer con frecuencia.

Esta es una de las cosas más importantes que pueden arruinar una relación entre humanos y perros. Veamos el corte de uñas como ejemplo. Si tu perro odia que le corten las uñas, probablemente no sea una buena idea que le cortes las uñas constantemente sin tener en cuenta sus sentimientos.

Eso puede hacer que el perro se exprese de maneras que dan mucho miedo, como morder o tratar de alejarte de él.

2. Quitarle sus cosas.

Esos huesos y juguetes que aman no deben usarse como palanca. No conviertas el llevarte estos recuerdos en un hábito.

Si están usando activamente esas cosas, esta es una de las cosas que puede conducir a la protección de los recursos.

3. No escuchar su lenguaje corporal.

Si tu perro, por casualidad, no quiere que lo recojan en este momento, no lo recojas. Tienes que ser consciente de lo que intentan decirte con su lenguaje corporal De lo contrario, corres el riesgo de poner en peligro su confianza.

4. No ser un defensor de tu perro.

Tu perro necesita tu ayuda para navegar por el mundo, lo que significa que debes defenderlo cuando lo necesite. Algunos ejemplos, incluyen dejar que otras personas toquen a tu perro aunque no les guste u obligarlos a estar cerca de muchos otros perros cuando en realidad no es lo suyo.

5. Ignorar las necesidades, deseos o predisposiciones genéticas de tu perro.

La ignorancia no es felicidad cuando se trata de ser padre de un perro. Si has elegido una raza específica, infórmate de lo que eso implica por completo.

Existe un gran mito de que todos los perros son iguales. Ese no es el caso. Cada raza es diferente. Cada raza tiene necesidades diferentes.

6. Ser demasiado correctivo con tu perro.

Gritar constantemente o incluso golpear a tu perro definitivamente puede arruinar la confianza. La premisa de un programa de adiestramiento canino es promover el refuerzo positivo para convencer a las personas de utilizar otras formas de lograr que sus perros se comuniquen con ellos.